* El primer jugador que hizo sonar una vuvucela fue el delantero francés Antoine La
rroché. El ariete se nacionalizó etíope en 1969 y en un partido disputado en Soweto, ante Sudáfrica, se tomó los genitales tras convertir un tanto. Los bufana bufana invadieron el campo y le hicieron una enema de corneta. A partir de allí, cada vez que respira fuerte, suena el simpático instrumento.* No hay constancias de que el delantero italiano Paolo Rossi, goleador de España '82, haya tenido fantasías sexuales con Gina Lollobrigida.
* A el arquero camerunés Thomas N'kono (foto), una leyenda de ese país, le sale muy mal la provoleta.
* En el Mundial del '50 Suecia fue tercero y sus rivales descubrieron lo difícil que era jugar con suecos. Lo afirmó Ademir, el scorer brasileño: "Te da sensación de gran porte, presencia, te sentís el más alto del mundo pero no se puede jugar con suecos, es complicadísimo. Cuando piqué a buscar la primera pelota me torcí el tobillo".
Romualdo Filkenstein.
El Pregón de Elortondo.
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